No hablo de la película de Daniel Day Lewis que cautivó a medio mundo. Me refiero a mi innata carencia de ritmo, la cual me hace imposible intentar cualquier tipo de baile, por sencillo que parezca.
Seré honesta: nunca me he esforzado realmente por intentar aprender a bailar, porque, simplemente no es lo mío y no me hace mucha gracia hacer el ridículo frente a los demás (por lo menos no a sabiendas). Quizá se deba a que mi idea de una velada divertida esté más bien cercana a conversar sobre las últimas películas que has visto, los chismes de quién sale con quién (a estas alturas de la vida, quién se casé con quién y quién se divorció de quién) y evitar al mínimo el tongoneo con un semi-desconocido que además que suda encima de tí, amenaza con pisarte.
Nunca he podido considerar que he disfrutado una fiesta a plenitud porque siempre SIEMPRE algún irreverente te pregunta "¿Quieres bailar?" y en lugar de respetar tu incólume "Yo no bailo" todos te preguntan "Y eso??????!!!!!!¿Cómo que no bailas??"
Nada como los 90 con su dosis de ska, que en realidad eran patadas y empujones. Era lo único que animaba mis fiestas de juventud.
Nunca me hizo falta aprender a bailar. No hay nada más falso que pretendan decirte que tu vida está incompleta sin el baile. Si tambien te acosan diciendote que "..tienes que aprender porque sinó nunca conseguirás novi@..." no les hagas caso, siempre encontrarás a alguien a quien no le importe que no des vueltas como un trompo en medio de una pista de baile, a menos claro, que esperes que esa persona sea Chayanne. (Aunque si pensaras así, probablemente no leerías este blog)
2 comentarios:
Y con un poco de suerte (como en mi caso) hasta consigues pareja que tampoco baila ;)
A eso se llama suerte :D
ASONOBAIMHON(Asociación de No Bailarines A Mucha Honra) :D
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